
En vista del éxito que tuve con las casitas,y a pesar de llevar mil y una figuritas pequeñas, dado que ya había recopilado una gran cantidad de colores en madeja, pensé en realizar unos cuadros para el “office” de la cocina.

La puntilla que se aprecia, es puntilla pegada con punto escondido, por que me gusta innovar, y los fallos que seguramente puedan tener mis labores, es que yo soy así, no suelo cuidar demasiado los detalles al milímetro, por que si no, sería como comprar de fábrica, todo igual. Pienso que las obras artesanas siempre tienen que tener algún fallo o cambio ,si no ,serian todas igualitas como en el mundo de la pequeña "Momo".

Este diseño lo encontré en la revista “Labores del Hogar” y venía con motivo de Navidad, aunque a mí, sinceramente desde el principio, siempre la imaginé en mi cocina, pues, con los tarritos, los estantes y todo lo demás, me llamaba poderosamente la atención.
Los tres cuadros formaban una bonita combinación, y los enmarqué en rojo fuerte con el paspartú también en rojo siempre me a gustado enmarcar los cuadros con los colores que le iban al motivo, nunca a la pared ni a la decoración por si luego los cambiaba de sitio, como así a sido, al cambiarme de casa, ahora están separados, pero creo que siguen siendo una bella composición.